lunes, 4 de febrero de 2013

Y es triste pero es así, la mayoría de las personas no aprecian su vida hasta que no ven la suya o la de una persona próxima amenazada. Como dice un refrán: "no se da cuenta uno de lo que tiene hasta que lo pierde."
Mi valoración de la vida cambió en una sala de quimioterapia, yo estaba de visita pero había un hombre que no; aquella persona estoy seguro que me dijo una de esas frases que no se te olvidan en la vida, aquel hombre dijo: "Estoy aquí por un cáncer, no uno cualquiera, este no tiene cura. Me ha hecho más fuerte, ha provocado que viva cada día como si fuese el último pero, ¿sabes qué es lo mejor que he conseguido?. He aprendido a valorar la vida y a que los que me rodean valoren mucho más la suya."

No hay comentarios:

Publicar un comentario